Espiritu Constitucional

              J
CONSTITUCIONAL*
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N
na constante ünion en los sentimientos de los defensores de la Párfítf < hafafí felices sus hijos y rendirán al Dios de la Justicia los olocaustos sagrados que sus vií-
tuosos Padres les han prestado para su posteridad y la nuestra. Seguid* seguid constantes compatriotas vuestro fuego divino, é imitad la desicion nunca interrumpida
de uno de los que merecen con razón colocarse en el asiento del inmortal Quíroga-f
por  su  amor á la Constitución, nuestro compañero de  armas   Merino.
Este Ciudadano Oficial, digno de  todo  elogio,  cuyo espíritu Constitucional le hace
atropellar las  negras   y asquerosas   cadenas   del  servilismo,   nos  dá   á    los jbuei os   militares    el   bello ejemplo patriótico de que algunos  en   este   reino   carecen,   porque    te
hallan  dominados  y obcecados   en   el  cieno   pestilente   de  la   adulación   y   despotismo*
con   que  siempre   y  por muchos   siglos   han < disfrutado   con   agravio    de   los    buenos
los   honores y   preminencias  que   la razón y justicia   no  les daba;  llamándolas  al  castigo de   sus crímenes   y   tiránicas   intrigas.   ¡Esta ha   sido nuestra  suerte!   pero el   mismo  cielo  ya cansado,   ha visto con horror f   espanto   esta   titania,   y  os dio eñ   justo
premio de  vuestro   sufrimiento la  santa   Carta   que el   mundo   entero  admira, para   lavar'  con ella y   remunerar   vuestras  penas,   vuestros   íobre;nlros, vuestras   visisítúdés*   y
vuestras- conrinuas   penurias.   Despreciad  ;i   estos viles¿   y   levantando   las   triunfadoras
espadas   con el voto  Unánime de  nuestra desgraciada Nación y  el  del  mejor de los Re-
yes Constitucional   Femando: este virtuoso Monarca es et primero  que   os  lo  manda y
el primero también  que   os  defenderá,   puesto   á   la cabeza del augusto Congreso  ¿habrá
uno  solo que  con esta egide mas brillante que  la de Minerva ,  tarde ün solo momento
en perseguir  al infame que  ose   indirecta    o   directamente   pronunciar:  no  es justa   Lt
sagrada Carta,..qile en el. mismo momento  con   mano firme   y   valerosa,   dude   entregarlo á su representante  el vil sacrilego que  la -infringió?  ¡creo  que   no!   pues,   ya    es
tiempo   compañeros  de   armas   de   manifestar    nuestro   entusiasmo,   y movidos   de   c:té«
hacer  la$ pesquisas, nó   llevándoos   de    pueriles   personalidades,   ni    ccfcoides    venganzas , descubriendo siempre el tirano  homicida de  la Patria ; y con  esta conducta haceoí
respetar dé  todo tirano  opresor, de  todo infractor,  como  lo hacen   nuestros   hermanos
de la inmortal Hisperiá,  ellos lo   agradecerán  y   dirán no en vano formamos tina misma familia y no desmienten   aquellos   los justos   sentimientos   que unen   de   la  mit-
ma  Sttefte   nuestras   almas.
La oficialidad del Regimiento de Dragones de España, que se halla en este pite-'
blo, llena del mismo ardor y entusiasmo consagra tocos sus votos á el de sü compañero Merino y se glorian de acompañarle en sus buenos deseos, quienes sin
separarse de esto un solo instante, derramarán en frente de sus Estandartes la última gota
de sangre en defensa de nuestros sagrados derechos; siempre á porfía repetirán viva
la Patria y   el Rey Constitucional, y   su   divisa,  la Ley   ó   lá muerte.
San   Martin   8   de Octubre de   1820.
Lo da  al publico  esta Oficialidad gratis.
Puebla: Oficina   del Gobierna.